El engañoso arquetipo latino
Por José-Christian Páez
El festival Tiempo Latino ha sido un fracaso. Se busca culpables: el supuesto precio de las entradas, la falta de publicidad, la focalización errónea del público objetivo (algunos señalan que debió ofrecerse al público español y no sólo al latino).El hecho es un buen barómetro del interés y desinterés de la comunidad latinoamericana. Se hace añicos la hipótesis de quienes afirman que a los latinos basta con ponerles un poco de salsa o algo movidito y unos cuantos culitos sabrosos como cebo para que acudan en masa. Se entiende que esta música y este ritmo ejercerían en estas personas el mismo efecto que sobre los ratoncitos las notas ejecutadas por el flautista de Hammelin.Los cortos de vista no han comprendido que Latinoamérica es un continente diverso y, por lo mismo, rico en esa diversidad y que así como tiene variedades de música, también las tiene en literatura, pintura, escultura y en otras disciplinas como el deporte. A alguien ¿le suena el nombre de Ronaldinho? O alguien ¿ha olvidado a Javier Sotomayor, plusmarquista mundial de salto de altura? . El contenido completo del éste articulo en :
Por José-Christian Páez
El festival Tiempo Latino ha sido un fracaso. Se busca culpables: el supuesto precio de las entradas, la falta de publicidad, la focalización errónea del público objetivo (algunos señalan que debió ofrecerse al público español y no sólo al latino).El hecho es un buen barómetro del interés y desinterés de la comunidad latinoamericana. Se hace añicos la hipótesis de quienes afirman que a los latinos basta con ponerles un poco de salsa o algo movidito y unos cuantos culitos sabrosos como cebo para que acudan en masa. Se entiende que esta música y este ritmo ejercerían en estas personas el mismo efecto que sobre los ratoncitos las notas ejecutadas por el flautista de Hammelin.Los cortos de vista no han comprendido que Latinoamérica es un continente diverso y, por lo mismo, rico en esa diversidad y que así como tiene variedades de música, también las tiene en literatura, pintura, escultura y en otras disciplinas como el deporte. A alguien ¿le suena el nombre de Ronaldinho? O alguien ¿ha olvidado a Javier Sotomayor, plusmarquista mundial de salto de altura? . El contenido completo del éste articulo en :
